El 16 de Noviembre el Observatorio de Participación de Madrid convoca
sus III Jornadas para compartir experiencias regionales relacionadas con
la participación social.
Publicado originalmente en El Salto: https://www.elsaltodiario.com/democracia-participativa/como-participa-la-region-de-madrid
Sabe usted cuántos procesos participativos institucionales existen en
su ciudad? Antes de 2015, ¿había debatido usted en su propio salón de
plenos cualquier necesidad de su pueblo? ¿Vota online el modelo X o el
modelo Y? No es menester seguir
insistiendo en el poder de la gente para alcanzar transformaciones
sociales amplias. Pero sí se debe evaluar cómo de relevantes están
siendo los procesos de participación institucionales organizados por los
“nuevos Ayuntamientos del cambio” para conseguir poner la toma de
decisiones públicas en el centro del tablero.
Tras una ola remarcable en los años 80, que se produjo con la llegada de los
primeros gobiernos socialistas, se incluyó a muchas asociaciones
vecinales y agrupaciones comunitarias en la toma de decisión en
municipios y pueblos, se produjo una fase de institucionalización de la
participación. La década que nos ocupa copia la fórmula de procesos
experimentados antes y durante el 15M. Digamos que se trata de superar
los límites de la democracia representativa e instalarnos lo más posible
en una participativa.
También
desde el ámbito académico se aprecia la eficacia de este modo de
actuación. Incorporar a más agentes sociales en la gestión y en la toma
de decisiones “es reconocer los múltiples actores que conforman la red,
aceptar su participación en las tareas de gobierno y gestionar las
relaciones que se establecen entre ellos con el fin de potenciar
actuaciones integradas”, así manifiesta Joan Subirats, de la Universitat
Autònoma de Barcelona.
El Observatorio de Participación
de Madrid, organiza la tercera edición de unas jornadas para revisitar
una de las marcas distintivas que han tenido más protagonismo en esta
última legislatura a nivel municipal: la participación institucional.
Este observatorio, después de dos años en el ecosistema madrileño, ha
estado pendiente de sostener una perspectiva amplia, y una evaluación
permanente de las múltiples propuestas de participación institucional
que se han ido implementando en la región de Madrid. Nos referimos por
ejemplo a foros locales, presupuestos participativos o sistemas
telemáticos de votación y debate que permiten potencialmente consultar o
realizar propuestas a grupos amplios de población.
Según Javier
Caballero, una de las personas que ha estado organizando la sesión
dedicada a los foros locales de Madrid: “La gente que formamos parte del
observatorio somos personas raras, en el sentido de estar más
pendientes de los procesos, de las deliberaciones, de los acuerdos, en
lugar de que se hagan las cosas para ya: los resultados”. En las
primeras jornadas, celebradas en 2016, señalaban críticamente la
desconexión entre concejalías y áreas de un mismo territorio embarcadas
en procesos de este tipo. Por otro lado, otra de las críticas subrayan
el agotamiento de las vecinas ante la dispersión de los procesos
(barrios, distritos, arquitectónicas, telemáticas, infantiles, de
salud…), y de la frustración motivada por no ver resultados reales.
La
FRAVM, que participa en este observatorio, es un ejemplo claro de la
presión que las asociaciones vecinales puede ejercer sobre la Comunidad
de Madrid. En este caso, su empeño ha sido focalizar las buenas
prácticas de municipios más pequeños. En la jornada proponen observar la
experiencia de la Semana de la Juventud de Rivas Vaciamadrid, “nos
apetecía una experiencia de fomento de la participación”, explica Silvia
González, vocal de la federación. También “El Pueblo que Queremos”,
una auditoria colectiva llevado a cabo en Las Rozas que compara los
indicadores de transparencia, ha sido propuesta por la la red vecinal
madrileña.
Valentín Villarroel de la Red de Municipios del
Cambio, además de concejal de Las Rozas, señala que el interés de la
jornada es compartir las experiencias que han tenido lugar en municipios
de la región: “Venimos de unos años en que las demandas de la
ciudadanía a las instituciones se han centrado en que hubiera más
participación ciudadana”.
Al preguntarle sobre resultados,
menciona las experiencias de Alcalá de Henares, Bustarviejo y Zarzalejo.
Ejemplos de municipios que han utilizado creativamente metodologías
como Oasis —método para microtransformaciones comunitarias—, o que han
puesto a disposición de entidades y colectivos recursos como espacios
para desarrollar actividades.
Presupuestos participativos, huertos
comunitarios, transformaciones en patios escolares ya forman parte de
la red de experiencias reales en la región de Madrid. La cuestión es,
¿seguimos mareando la perdiz o construimos acuerdos?