El ambiente decae por causas demasiado macro
que no podemos percibir casi nunca en su totalidad y que nos son ajenas,
absurdas y estúpidas en muchos sentidos. Nunca nos enseñaron a entender que el poder
es tan nuestro como de esas estructuras macro, pero nos interesa a toda costa
recuperar el tiempo perdido y ponernos manos a la obra en este proceso de
creación que iniciamos un día que no recordaremos como especial, porque el
presente siempre es la única posibilidad para cambiar ese presente. Pensamos en
fuego. Pensamos en creación puramente simbólica que se retrotraiga en un
entendimiento del mundo más nutrido de experiencias diversas.
No tenemos marco de reflexión porque el cuadro
aún no ha sido pintado pero en ello estamos. Manifestamos nuestro poder difuso,
diverso, imaginativo, somos muchos: más de lo que podamos imaginar y nuestro lenguaje
nos delata, así no preguntamos de dónde eres, sino qué eres capaz de aprender,
crear o imaginar. No sirve más este o aquel, porque no venimos a este mundo a
servir, quizás si a bien vivir. Porque nos hemos aburrido de los cuentos de los
mayores, en este caso no cuentan nuestras edades, el color de nuestras pieles
es sumamente indiferente. Así, la morfología anatómica nos da bastante lo
mismo. Queremos disfrutar de este momento en este lugar, he aquí donde nos
encontramos y he aquí el inicio de algo, sin descuentos ni porcentajes.... poco
a poco irá surgiendo, lo notaréis en vuestro entorno, seguramente disfrutéis
mucho o poco de él, y no nos defraudaremos, pues hasta ahora hay cosas hechas
por otros valiosos y recogemos el testigo.
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